Detrás del rostro, no siempre hay hueso...

martes, 10 de junio de 2008


Nos dedicamos a andar por la vida como quien entra en un supermercado y va escogiendo las cosas que más le gustan, ajustándose obviamente al presupuesto que tenemos, nos quedamos pasmados observando qué cosas tenemos que prescindir porque obviamente no nos llega para todo.

Así puede ser la vida, pero obviamente no todo es oro lo que reluce, o no todo el monte es orégano, son dos dichos que todo el mundo sabe pero que pocas veces pone en práctica.


No siempre detrás del rostro hay hueso, no siempre lo que vemos es lo real, el que más o el que menos yeva una máscara, digo una porque seguro que unos sólo tienen una pero otros tienen una larga colección de máscaras. Y sí, es así. Es la pura realidad, de puertas para fuera la mayoría se puede decir es diferente a tal y como es, e incluso de puertas para dentro puede suceder lo mismo. Cada uno es como es, la vida es una carrera continua de supervivencia, el que se queda atrás tiene mucho que perder. La vida es un juego, y hay que saberle sacar el mayor partido posible, cada uno a su manera, pero en este post al menos analizaré esas personas que con su máscara deambulan por el mundo entero.

Están esos que se esconden del resto porque son vulnerables, están otros que simplemente no les gusta que sepan lo que piensas, están los que lo hacen por diversión, sin darse cuenta, aquéllos que lo hacen porque es lo mejor que saben hacer, lo hay y de muchos tipos. ¿tú cuál crees que eres? O piensas que tú no eres así. Realmente sabes cómo eres o simplemente estás tan metido en tu papel que no sabes ni tú como eres en realidad.

Mucha gente no sabe que está actuando, otros lo tienen como modelo de vida, una especie de protección propia, personal y secreta; que piensan más de lo que hablan, que dicen menos de lo que saben y que son protocolariamente correctos. Gente que está pero no te das cuenta, gente que pasa sin más sin llamar la atención, pero que saben más de lo que piensas, que ocultan lo que quieren y cuentan lo que mejor les venga.

Al fin y al cabo son gente como tú y realmente tú eres como ellos. La diferencia es simple y sencilla, unos no saben que lo hacen y actúan pensando que son tal y como se muestran y están aquéllos que lo saben, son conscientes de ello y actúan con esa máscara de forma natural, una naturaleza completamente superficial.

¿un saludo sincero?

4 comentarios:

Desamparados dijo...

conozco muchos casos de esos que hablas... llenos de máscaras... de falsedad, miedos, un mundo de hipócritas!!!! Yo? creo ser de ese club reducido sin máscaras... soy demasiado sincera, llegando incluso a borde... esto dicho por algunos... aunque en el fondo me adoran... lo sé!!... y cuando intento disimular, mi cara me delata de tal forma... es inevitable!!! jajaja...

Un Saludo Muy Sincero!!!! Amos... sinceridad ante toooodo!! jajaja...


BS

Lara dijo...

Por supuesto que la vida es un juego y de como muevas las fichas depende el final ;)
Muuuuacks!

Anónimo dijo...

me ha encantado este post, es realmente muy bueno..creo que todos hacemos eso, yo por ejemplo por vulnerabilidad pero no se me da muy bien y siempre acabo diciendo lo que pienso.

te ha faltado la segunda parte, has probado a ser sincero con alguien que casi siempre se calla todo?
yo si...y es entonces cuando te dicen que "las vas soltando", que recriminas cosas y que vas de listo por la vida..debe ser que la sinceridad no es siempre bienvenida y que insultar ayuda a la coraza de no mostrar nunca lo que piensan..

si haces el experimento,descríbelo en otro post..sería genial

bessos sin disfraz

fulanita dijo...

ufff!!
un post genial ;)