Soledad

domingo, 2 de septiembre de 2007

Mucha gente dice que el peor sentimiento o uno de los peores es la soledad.

A pesar de que para mi no sea el peor (la frustración creo que está por encima), cierto es que es una auténtica mierda; así que por ello pienso al menos que es uno de lo peores, eso sí.

A veces la soledad nos acompaña; se hace "compañera" de nuestro viaje o de nuestro vagar por la vida.

Con los años y sobretodo en la universidad (digo sobretodo, porque al ser el momento de mi vida que me está tocando vivir) llegan las despedidas ( tema muy utilizado estos días en varias blogs amigas) y tarde es el día, en el que uno se esté quedando sólo, que es el rezagado pero que aún no siéndolo, la despedida no se puede evitar, así es la vida.

Hace dos cursos, y ante la inminente llegada de uno nuevo en menos de un mes; las despedidas comenzaron de la gente que se encuentra muy, muy, pero que muy adentro de mi corazón; Primero David y Miguélez, mis queridos padrinos de la residencia, con ellos aprendí mucho y me hicieron sentir como un privilejiado, puesto que raro es que los mayores de una resi te acojan para enseñarte como van las cosas en ellas, siempre han estado ahí, siempre me han escuchado, me han ayudado, me han dado consejo, me he reído y vuelto a reír con ellos. Santi Rey, con el que uno nunca se cansaba de hacer deporte, de explorar el mundo y darle ese toque existencial a la vida.
El curso pasado se han ido ya de la uni, Jesus, el eterno abuelo que nos cuidaba como niestos, se preocupaba y nos pegaba auténticos tirones de orejas a estas juventudes locas de hoy en día, jeje. Ahora anda por London intentando infundir un poco de raciocinio a la mentalidad británica.

Y ya este año no contaremos por nuestros lares con Rocco, que se nos va a estudiar a la gran capital Madrid, a Juli, que a Holanda se nos va de Erasmus; Herva que en pocos días se marcha a Polonia también de Erasmus para terminar como Juli la carrera. Y Silverio y Danielo, que ahora están todo concentrados preparando el MIR... con Dani aún hablé ayer durante más de una hora por el teléfono, haciendo una especia de terapia riéndonos hasta casi vomitar comentando movidas del youtube, y de la vida en general, Dani chichón no sabes cuánto te echo de menos. Y Rubo, como no, que será de mí sin tí, con esa visión de la vida y con ese caracter que hacía que las horas pareciesen segundos.

Y vamos a dejar de ponernos ñoños, que estamos en víspera de exámenes y mientras hago un descanso del estudio, con el café a una mano, no es plan de contar aquí la vida, que el tiempo es escaso...ya os rayaré después del doce cuando sea libre ;)

Pocos quedamos la verdad, Rai, Xester, Setes y yo; pero con la buena nueva de que Rul, vuelve de su Erasmus en las Azores, sano y salvo, para compartir techo conmigo jejejejeje. Sin olvidar a Berto y a Monti mis compañeros de facultad.
Lo dicho ya vamos quedando menos; pero aún así las despedidas se hacen dolorosas; sobretodo en el caso de este año de Rubo y Danielo.

Es un sentimiento amargo y oscuro, por decirlo de alguna manera; pero supongo que así será la vida.

Lo peor de todo es que me siento frustrado por despedirme de seres queridos que laten en mi corazón, y no poder compartir el día a día con ellos... digamos que estaba habituado a convivir con ellos y ahora cada uno desde su distancia siguen conmigo... qué buenos tiempos.


saulillo

12 comentarios:

Deftonia dijo...

A veces esas despedidas son simplemente 'hasta luegos', yo acabé hace 3 años la carrera y seguimos viéndonos casi todos...
No sé yo qué es peor, si la soledad o la frustración... La soledad buscada no es mala, pero la que no buscamos es terrible.

Deftonia dijo...

Por cierto, 'La casa de las dagas voladoras' con un simple aceptable??? Es buenísima :))))
Para gustos... los colores, está claro :)

Mandarina azul dijo...

Saulillo, no sé qué pasa, debe ser contagioso... he visitado recientemente varios blogs en los que habláis de la soledad y las despedidas... Por suerte, siempre hay también felices encuentros.

Un besote :)

Carola dijo...

Hola gracias por tu visita, y a la vez encantada.
Tambien he vivido algo así tener que despedirse de los seres más queridos al tener que marcharse a otro lugar, a muchos kilometros de distancia, por alguna causa, pero el contacto debe esatar ahí permamente para sentirlos más cerquita aunque no los podadmos sentir, abrazar, tocar, asi sea grande la distancia que jamas se pierda el contacto y eso es importante.

Anónimo dijo...

las despedidas son siempre duras y es inevitable..duelen solo keda intentar mantener el contacto con los qse dejen
bessos

Karmen dijo...

Hola ,gracias por leer mi blog,no lo esperaba.
La soledad puede ser una fiel compañera,para aprender a desarrollarnos como personas y ayudarnos a encontrarnos si andamos perdidos.Pero debe ser dosificada;todo en abundancia es malo.
Cuando hay grandes amigos no existen despedidas,porque aun lejos siempre estaran cerca,porque estan en todas partes,todo lo que te recuerde a ellos te hara sentir su presencia,incondicional.

Anónimo dijo...

Hola Saulillo, gracias por tu visita.
No te preocupes, hombre, esas despedidas aunque dolorosas por los vínculos tan fuertes, van a ir acompañando de nuevas amistades, es una regeneración de la vida.
Al final y no tardando mucho quedarán aquellos que te acompañarán en el futuro.

Jodo, me he puesto sentimental, he recordado todos aquellos que dejé en la universidad. Historias de la vida, ah y no estás solo.

Suerte con tus exámenes.

Volveré a leerte.

Anónimo dijo...

todas las despedidas son tristes, pero no lo son definitivas,,, por lo menos la mayoría¡ yo acabé la universidad hace 7 años ya y mantengo contacto con todos los buenos colegas que tuve allí. con los que mejor nos llevábamos sigo quedando 1 vez al més, o nos vamos unos días de vacaciones juntos, aparte del contacto telefónico. con los demás sé que aunque les vea un par de veces al año siempre están ahí. pero con la gente de la universidad que realmente te llega no pierdes el contacto.

me pasó lo mismo mis últimos años en la facultad: se iba gente que había estado siempre conmigo y me sentía sola. pero cuando 'vueles' tú te das cuenta de que hay gente que se marcha (NO de tu vida) pero hay mucha más gente que te espera fuera. la vida da muchos cambios, pero no siempre a peor.

de todas formas yo también tuve esos sentimientos de soledad a medida que veía que se pasaba la que creí que era la mejor época de mi vida y la gente se iba,,

besos

Isabel Burriel dijo...

Saulillo (si es que hasta tu nombre suena cariñoso) aunque no lo creas, aunque el mundo ahora parezca tan grande, con tantos cambios y con tantas despedidas, nunca estarás solo.

இலை Bohemia இலை dijo...

Saludos vengo a devolverte la visita y a darte las gracias por tus palabras de apoyo en mi blog. Volveré...

abrazos

Igrein dijo...

Cada persona que conoces, que cala tan hondo en tu corazón, deja parte de su ser en tu persona. Así que, si lo piensas bien, realmente nunca se van del todo.

Un besazo!

Bego dijo...

Despedidas. Cambios... Nunca mehan gustado, pero con el tiempo he empezado a tenerles menos miedo. Muchas veces las despedidas qu enos parecen un adios dependen de nosotros convertirlas en hasta pronto. Y además en tus palabras enseñas imagenes de grandes momentos que no t van a abandonar y que has tenidos uerte de vivir. Ahora recuerdas con facilidad esos grandes momentos y si merecen la pena, cuando tengas 20 años más y tengas ya algun crío, y tengas un trabajo serio y un dia pienses que tu vida es seria y q eres "uno mas" podras cerrar los ojos recordar un atardecer haciendo deporte en tu epoca de la resi y cuando los abras habrás dejado de ser "uno mas", recondciras tu vida hacia donde quieras o sonreiras por tenerla ya... Ah! y por la noche quedaras seguramente a tomar una cerveza con algun viejo amigo de la epoca de la uni.
Don't worry! y suerte con los examenes :)